“Lamento cuando mis hermanos no comparten mi decisión de oír solamente una Voz, pues eso los debilita como maestros y como alumnos. Con todo, sé que no pueden realmente traicionarse a sí mismos ni traicionarme a mí, y que sobre ellos es donde todavía tengo que edificar mi iglesia. No hay ninguna otra alternativa al respecto porque únicamente tú puedes ser la roca de la iglesia de Dios. Allí donde hay un altar hay una iglesia, y la presencia del altar es lo que hace que la iglesia sea santa. La iglesia que no inspira amor, tiene un altar oculto que no está sirviendo al propósito para el que Dios lo destinó. Tengo que edificar Su iglesia sobre ti porque quienes me aceptan como modelo son literalmente mis discípulos. Los discípulos son seguidores, y si el modelo que siguen ha elegido evitarles dolor en relación con todo, serían ciertamente insensatos si no lo siguiesen.” (T.6.I.8:1-7)
no como líderes o gurús, sino como humildes Servidores cuyo único objetivo es sostener el espacio para que el Espíritu Santo hable.
para disolver la ilusión de separación, perdonar y revelar nuestra única y perfecta realidad.
Manifestar la Luz de Dios que, por su naturaleza, se expande. La paz que anhelamos en el exterior solo puede hallarse en nuestro interior. El camino más efectivo para alcanzarla es a través de las relaciones y en compañía de otros.
Es el primer paso. Se basa en la admisión de que no tenemos todas las respuestas y que necesitamos de los demás para ver con mayor claridad.
Se construye un espacio de seguridad y respeto mutuo. Aquí, la vulnerabilidad se convierte en una fortaleza, permitiendo una comunicación real y honesta.
Los pares se unen por un objetivo común, que trasciende los intereses individuales.
Los Ministros de Dios lideran y guían una Delegación de la Comunidad, sirviendo de ejemplo y apoyo en el camino espiritual, extendiendo el mensaje de amor y perdón en su esfera de influencia.
Los Guías de Dios son los Facilitadores que dirigen y nutren los Grupos de Pares, creando un espacio seguro para el estudio, la práctica y el crecimiento conjunto en la Metodología P.A.C.I.E.N.C.I.A.
Los Discípulos de Dios son aquellos que siguen activamente las enseñanzas de Jesús, buscando aplicar Un Curso de Milagros en su vida diaria y extendiendo la Ofrenda de Milagros a sus Hermanos y el Planeta.
La Metodología P.A.C.I.E.N.C.I.A. es un claro ejemplo de cómo el Poder de los Pares se aplica de manera estructurada.
Un individuo presenta un desafío o una situación (su “caso”) al grupo de pares de manera clara y honesta.
Los pares, sin imponer su opinión, hacen preguntas para ayudar al individuo a ver la situación desde una nueva perspectiva.
El grupo ofrece reflexiones, no soluciones, permitiendo que el individuo encuentre su propia respuesta.
Quien fue elegido con su caso es ahora el Beneficiario. Una vez sucedida la Metodología deberá declarar cuál fue su aprendizaje y con qué acciones se compromete.
A partir del Sistema que ha elaborado la Iglesia Metódica Un Curso de Milagros, el Beneficiario deberá elevar su Ofrenda de Milagro y este quedará automáticamente a disposición del mundo.
Nueva reunión: Ahora el Beneficiarios es Anfitrión. Da la bienvenida y cuenta cómo ha sido su experiencia desde que pidió el Milagro. De ahí en más comienza el próximo paso de la Metodología.
“Encontré en Filiación un lugar donde mi fe crece y mi vida cambia cada día. Es verdaderamente un hogar espiritual.”
— Ana G.
“El método de estudio me ayudó a entender El Curso de forma práctica y cercana, aplicando sus enseñanzas diariamente.”
— Carlos M.
“La Comunidad me apoyó en momentos difíciles y me enseñó el verdadero significado del amor cristiano en acción.”
— María L.
Esto garantizará que, sin importar la ubicación geográfica, cada Grupo de Pares y cada Guía de Dios, imparta la Metodología con la misma coherencia, profundidad y fidelidad a los principios de Un Curso de Milagros, asegurando una experiencia transformadora unificada en todo el mundo.
La interacción genuina y el soporte mutuo entre Ministros, Guías y Discípulos de Dios, asegura que cada miembro se sienta valorado, escuchado y empoderado en su camino de crecimiento espiritual, en línea con el espíritu de amor y perdón que define UCDM.
Nuestro objetivo es demostrar cómo la comprensión profunda de la mente y el universo, desde una perspectiva tanto espiritual como racional, puede conducir a una paz interior y exterior duradera, validando que “De la Ciencia a la Paz” es un camino integral hacia la Verdad.
Capacitaremos a nuestros miembros para ser faros de luz, capaces de solicitar y presenciar milagros de sanación en todos los niveles, contribuyendo a la transformación colectiva del planeta hacia un estado de mayor armonía y perdón.
La Iglesia Metódica Un Curso de Milagros surge como la materialización de un propósito divino: ser el vehículo funcional para que la profunda sabiduría de “Un Curso de Milagros” se traduzca en una experiencia vivida. No somos una institución que busca interpretar o modificar el mensaje del Curso, sino el custodio de la metodología que permite a la Filiación congregarse y actuar. Nuestro compromiso es crear y mantener la estructura necesaria (las delegaciones, la academia de facilitadores y el estándar educativo) para que millones de individuos puedan encontrar el camino hacia la paz a través del estudio metódico y el poder de los pares. La Fundación es el faro que sostiene la visión de una red global de conciencia, garantizando que el mensaje de perdón y unidad se expanda con fidelidad, disciplina y el poder del Amor.
La Metodología P.A.C.I.E.N.C.I.A. es el “cómo” que responde al llamado de la Verdad. Es un sistema de estudio riguroso y, a la vez, profundamente amoroso, diseñado para guiar al estudiante de “Un Curso de Milagros” a través de un proceso de corrección de la percepción y deshacimiento del ego. Inspirada en la Honestidad de los 12 Pasos de Doble-A., la Visión Concreta de “La Alegoría de la Verdad” y el poder del consenso Entre Pares; nuestra metodología provee un rito funcional para la práctica diaria del perdón. Cada sesión es una oportunidad para entregar las ilusiones del ego, escuchar la guía del Espíritu Santo y, en la compañía de hermanos, recordar que la paz no es un objetivo distante, sino una realidad inherente que solo necesita ser revelada. La Metodología P.A.C.I.E.N.C.I.A. es el camino metódico que nos lleva de regreso al Hogar.
Sé parte de nuestras reuniones semanales de estudio y oración. Conéctate con otros buscadores de la verdad y descubre la sabiduría que te guiará hacia la paz. Es el espacio ideal para aprender, compartir y fortalecer tu fe, pidiendo milagros para ti y para el planeta.
Participa en el “Seminario de Facilitación del Método de Estudio De la Ciencia a la Paz”, organizado y dictado por la Iglesia Metódica Un Curso de Milagros. Este programa intensivo te dotará de las herramientas y el conocimiento necesarios para facilitar el aprendizaje y el crecimiento espiritual en tu propio grupo.
Este rol se alcanza por invitación, tras un período de dedicación y servicio como Guía de Dios. Implica un compromiso con la visión de la Filiación y la disposición para asumir responsabilidades de liderazgo y expansión. Se te apoyará con recursos y mentorías avanzados para que puedas establecer y manejar tu propia Delegación.
Para asegurar la integridad de la obra, los autores crearon la Fundación para la Paz Interior (FIP), cuya función principal es salvaguardar, publicar y distribuir el texto original de UCDM tal como fue recibido, sin alteraciones ni tampoco interpretaciones.
Otra fuente importante, tercero en la línea de sucesión del Curso, es Kenneth Wapnick y su Fundación Un Curso de Milagros (FUCIM), quien organizó todo el Material y lo ordenó así como lo conocemos hoy.